Hace unos días conversaba con un amigo bachiller de arquitectura y me comentaba de sus proyectos entre los cuales uno trataba de crear un software el cual pueda generar un diseño arquitectónico utilizando la inteligencia Artificial (IA).
Se presentó a un concurso pero fue rechazado por el motivo que yo también le mencione que era un proyecto anticapitalista. Obviamente lo que le dijeron fue más sutil, le dijeron que generaría un problema social al dejar desempleados a muchos arquitectos. Lo cual es algo con lo que concuerdo que pasaría.
Imaginemos que la IA se masifique y se usara en las distintas actividades del ser humano. Generaría un incremente del desempleo en todos los ámbitos del trabajo. Nos llevaría a una crisis económica en la cual la gente empezaría a protestar y posiblemente nos llevara a una revolución. Una revolución en el sentido que nos obligaría a cambiar de paradigmas y a replantear la forma que vemos el trabajo.
En este escenario es cuando la idea desarrollada por Constant Nieuwenhuys toma un sentido real. New babylon dejaría de ser una especulación urbana o utopía para ser un planteamiento bastante realista de las ciudades del futuro. Uno de los puntos más sustancial de New babylon , desde mi perspectiva, es que plantea una ciudad donde todas las actividades económicas como la agricultura, minería, pesca, y en general el trabajo se automatizarían.
Esto trae como consecuencia que el hombre disponga de bastante tiempo para el ocio este es el momento que nace el Homo ludens, el humano que juega. Las personas podríamos destinar nuestro tiempo para otras actividades como cultivarnos espiritualmente, intelectualmente, jugar , disfrutar de la naturaleza o viajar por el mundo.
Es un cambio de paradigma bastante fuerte para todas las personas que hemos nacido en este sistema capitalista pero con la información que se maneja actualmente lo natural seria que evolucionemos como sociedad o individualidades hacia ese destino.
Miguel Chiri
Facultad de Arquitectura y Urbanismo
Universidad Ricardo Palma
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