30 abril 2016

Eco Arquitectura - La contaminación del cemento



Bien se sabe que el exceso de producción de CO2 es el principal causante de el efecto invernadero, que está elevando la temperatura de la Tierra y que probablemente sea el causante de grandes trastornos climáticos. Por ello, cada potencial fuente de producción de CO2 esta siendo cuidadosamente analizada, para ver en que porcentaje cada una de ellas contribuye a esta elevación de la temperatura.

Ahora le toca a la industria del cemento, ya que recientes estudios señalan que son las culpables del 7% de la producción de CO2 del mundo, y que probablemente en los próximos años alcance el 10%. La industria del cemento produce CO2 por dos vías: por la conversión de carbonato de calcio a oxido de calcio en el interior del horno, y porque la industria necesita quemar gran cantidad de energía fósil para lograr calentar los hornos a 1450ºC.

Antes se había sub-estimado la producción de CO2 de las plantas de cemento y el error estaba en que se había considerado sólo esta segunda vía. Pero ahora se ha vuelto a recalcular, concluyendo la producción total de CO2 por las diversas industrias de cemento, alcanza 1.4 mil millones de toneladas anuales. 

Según ello, las fábricas de cemento serían las segundas causantes del incremento de CO2, siendo sobrepasada sólo por el CO2 que exhalan los vehículos de transporte. En todo caso, ello es mayor que el CO2 que producen los aviones, que últimamente han recibido mucha atención.

En términos globales, la producción de cemento está aumentando a razón de 5% anual, dice Joseph Davicovitz del Instituto de Geopolímeros de la Universidad de Picardy en Francia. Según esto, para el año 2000, estas industrias estarán produciendo el 10% del CO2 mundial (New Scientist, Julio 19, 1997, pág.14). Davicovits recomienda esforzarse en hacer modificaciones tecnológicas de estas plantas, que permitan disminuir la producción de CO2. El sugiere que se bombee el CO2 presurizado, de nuevo al cemento, para volverlo a convertir en piedra caliza. A él le llama la atención que nadie enfatice el CO2 que producen estas plantas, y que en cambio se insista tanto en los aviones que contribuyen con el 5%.







La huella ecológica del concreto

Con el paso del tiempo, el principal insumo de la construcción, como es el concreto armado, es motivo de ensayos para mejorar sus prestaciones. El cemento y todos sus usos, incluido el concreto armado han acompañado a la humanidad desde hace siglos. Cada vez, este gran insumo en la industria de la construcción busca ser mejorado y con más propiedades a las que ya tiene.

“El hormigón o concreto armado está consolidado como uno de los materiales de construcción más utilizados en el mundo por su precio competitivo y su disponibilidad regional. A la vez, es uno de los más comprometidos respecto de su impacto ambiental, debido a la gran cantidad de energía que se requiere para la producción del cemento. En ese sentido, desde hace algunos años se estudian nuevos procesos y combinaciones para reducir la huella ecológica del hormigón”, sostiene la publicación del portal de arquitectura Arq.com 


Agrega la información que una de las estrategias apunta a reducir la cantidad de cemento en las mezclas y sustituir los agregados provenientes de la extracción minera por otros disponibles como la escoria granulada, el polvo de silicio o la ceniza.

“Además, para obtener una mezcla de menor impacto ambiental, habría que reducir la cantidad de agua de amasado ya sea con el empleo de aditivos u optimizando la granulometría” se indica. El desecho de la combustión del carbón, que se conoce internacionalmente como fly ash , es compatible químicamente con las pastas de cemento.

“Las cenizas volantes se agregan en un 25 % en promedio a la mezcla de hormigón elaborado en reemplazo del cemento. Para el caso de un hormigón H 30, por ejemplo, la reducción de la cantidad de cemento en la mezcla representa 21,35 pesos por m³, lo que implica una economía de un 3 % aproximadamente, según análisis de Matermix”, se informa.

Sostiene el artículo que además de la reducción del costo de producción del hormigón elaborado, destaca otros beneficios que se alcanzan al adicional ceniza. El concreto ú hormigón es más fácil de trabajar y manipular, ya que puede ser mezclado en proporciones que favorecen a una mejor terminación en verano y no afectan el acabado en invierno. Esto es posible básicamente porque el hormigón mezclado con cenizas volantes necesita menos agua.


“Hay menos contracción y agrietamiento, por eso podemos decir que las cenizas crean un hormigón con una resistencia a la compresión superior en el tiempo”, dijo  Andrés A. Scarano, socio gerente de Matermix al mencionado portal informativo. Otras ventajas que aporta la ceniza es la reducción de las eflorescencias, una mayor protección contra la carbonatación y el ataque de sulfatos, y también mejora la reactividad de álcali sílice.


En Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, Australia, Portugal y Alemania, las cenizas volátiles producidas por la quema de carbón en las plantas generadoras de energía están autorizadas y homologadas por instituciones técnicas como producto no contaminante y beneficioso en la elaboración de hormigón, asfalto, membranas y ladrillos. Y se promueve su empleo por su contribución a la reducción de emisiones de CO2.








Publicado en Revista Creces, Abril 1998


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