Introducción
Para lograr los objetivos de movilidad sostenible es importante contar siempre con diversas opciones de medios de transporte con la finalidad de combinarlos e integrarlos.
Según esta visión, la bicicleta y los vehículos de movilidad personal (VMP), así como los cicloparqueaderos, se convierten en protagonistas de la intermodalidad urbana.
Este manual tiene como objetivo establecer parámetros técnicos para cicloparqueaderos en vía pública, edificaciones y estaciones de transporte público, a efecto de integrar los vehículos no motorizados a los sistemas de transporte masivo, así como fomentar la intermodalidad.
Se identifican los soportes adecuado para el estacionamiento de bicicletas y VMP, los sitios para su instalacion, asi como las
condiciones de seguridad requeridas.
El manual se divide en siete capítulos, en el primero se explica la importancia de la intermodalidad, se analizan los motivos de viaje, se identifican los tipos de vehículos no motorizados y los principios de diseño.
En el segundo se refuerzan las características de los soportes, las rutas peatonales, los emplazamientos, así como la señalización necesaria.
En el tercer, cuarto y quinto capítulos se especifican los parámetros técnicos de los cicloparqueaderos en vía pública, en edificaciones, así como en paraderos y estaciones de transporte público, respectivamente, describiendo en cada uno las características de los soportes, así como la cantidad necesario a partir de la demanda, además de su emplazamiento.
El capítulo seis indica los parámetros técnicos de los servicios adicionales para cicloparqueaderos tales como asistencia mecanica, sanitarios, bebederos, almacenamiento de objetos personales, dispositivos de acceso y monitoreo, entre otros; por último, en el séptimo capítulo se dan las pautas para su promoción.
La publicación de este manual es parte de la estrategia del Ministerio de Transportes y Comunicaciones para cumplir con lo dispuesto en la Ley No. 30936, que Promueve y Regula el Uso de la Bicicleta como Medio de Transporte Sostenible a efecto de que las entidades lo adopten como referencia base para incentivar el uso de vehiculos no motorizados, fomentar la convivencia vial y proporcionar instalaciones a todas las personas usuarias.
Diseño orientado a la persona
Es el diseño de un espacio o producto con las características idóneas para las personas a las que va dirigido, haciendo que su funcionalidad sea mayor, debido a que se considera las necesidades de las personas.
En el caso de usuarios/as de vehículos no motorizados, la falta de un espacio seguro de El estacionamiento es uno de los factores que limitan su uso como un medio de transporte cotidiano.
Dejar una bicicleta sin atención, incluso por un período corto, puede ser aprovechado para el robo del vehículo o de alguno de sus accesorios. En un estudio realizado en 17 países se estableció la incidencia de robo de bicicletas en comparación con otros vehículos (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía [IDAE], 2009).
Un estudio elaborado en Francia perdiendo que aproximadamente el 15 % de las bicicletas vendidas en un año son robadas. Del total de usuarias/os afectados, el 24 % la sustituye con una nueva, en muchas ocasiones mas baratas; mientras que un 25 % tarda más de un año en comprar otro vehículo no motorizado, lo que significa que terminan usando otro medio de transporte (FUBicy, 2007, como se citó en IDAE, 2009).
Por ello, es necesario que todas las instituciones públicas y privadas realicen esfuerzos para dotar de cicloparqueaderos seguros y cómodos en el origen y destino de los desplazamientos.
Esto ayudará a incrementar el número de viajes en vehículos no motorizados, debido a que la ausencia de sitios de estacionamiento para bicicletas aumenta la percepción de inseguridad.
Intermodalidad
Las/los diseñadores de infraestructura ciclovial y complementaria deben estar conscientes del alcance que tienen los vehiculos no motorizados para realizar recorridos en un entorno urbano. la bicicleta es el medio de transporte mas eficiente en viajes puerta a puerta de hasta cinco kilometros con una velocidad media de 16,4 km/h (Instituto para la Política de Transporte y Desarrollo [ITDP] México, &
I-CE, 2011b), pero sus ventajas van disminuyendo conforme se incrementa la distancia del recorrido.
Debido a lo anterior, la bicicleta es considerada como la opción ideal para viajes cortos y medianos, mientras que para traslados largos funciona muy bien en conjunto con el transporte publico. Esto significa que, sobre todo en ciudades medianas y grandes, es necesario generar rutas ciclistas interconectadas con las de transporte público que permiten a las personas combinar diversos modos de transporte.
Lograr que la conexión entre las redes de movilidad en bicicleta y el transporte público se haga de forma segura y eficiente contribuye a que las personas valoren la posibilidad de cambiar la forma en la que realizan sus desplazamientos.
Para los/las usuarias que realizan su primer o último trayecto de viaje caminando distancias mayores a un kilómetro, la bicicleta se vuelve una opción para ahorrar tiempo, reducir el esfuerzo físico, así como disminuir la exposición a las condiciones atmosféricos; y para aquellos que hoy se desplazan en vehiculo particular o en taxi, contar con dichos conexiones les facilitará tomar la decisión de modificar la forma en que realizar sus recorridos.
Debido a lo anterior, la bicicleta es una opción que conlleva beneficios para evitar la congestión vehicular y una reducción de recursos económicos destinados a este rubro. Por estos motivos, disponiendo de un espacio para el estacionamiento de vehiculos no motorizados, se vuelve clave para que el proceso de intermodalidad se realice de una forma adecuada y es un factor indispensable para lograr viajes eficientes puerta a puerta.
Se debe tomar en cuenta que las personas ciclistas, en sus recorridos, perciben problemas de seguridad en dos momentos: el primero se presenta al realizar su desplazamiento, que se dificulta por la ausencia, mala operación o deterioro de la infraestructura ciclovial para su traslado seguro y, el segundo ocurre cuando se llega a su destino y no se cuenta con un sitio donde se pueda estacionar la bicicleta sin el sentimiento de que esta pueda desaparecer o tener alguna afectación en sus componentes o accesorios.
Derivado de lo anterior, la creación de espacios para el estacionamiento de vehículos no motorizados es básico para resolver este problema e incentivar a que las/los ciudadanos opten por el uso Cotidiano de bicicletas y VMP como medio de transporte en la ciudad.
Continua el texto en el manual
FUENTES DE INFORMACION
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